¿Qué diferencia hay entre una casa prefabricada y una casa modular?
Las casas que no utilizan ladrillos están comenzando a ganar popularidad y muchos se preguntan en qué se diferencian las denominadas modulares de las clásicas “casas prefabricadas”.
28 de julio de 2025
18:14
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En un contexto en el que la posibilidad de tener una casa propia vuelve a ser parte de las conversaciones de los argentinos, impulsada por el resurgimiento del crédito hipotecario, muchos se preguntan qué tipo de vivienda es conveniente adquirir. A su vez, dado que el costo de construcción prácticamente se ha duplicado en dólares en el último año, surge la inquietud sobre qué se puede comprar o construir a precios accesibles sin sacrificar calidad.
En este escenario, una de las opciones de vivienda que se pueden considerar son las propiedades que se construyen en fábricas. Pero, ¿cuál es la diferencia entre las casas prefabricadas y las modulares, que poco a poco están ganando protagonismo y resonando más entre la gente?
Las casas modulares pueden transportarse a cualquier lugar del país. Una casa modular es una casa prefabricada. En otras palabras, se trata de un inmueble que se construye casi en su totalidad dentro de una fábrica. La diferencia radica en que, en Argentina, el término “casa prefabricada” a menudo se asocia a una baja calidad, por lo que se está tratando de enfocar la comunicación hacia el concepto de modular. Esto es para dar a conocer que las viviendas que se construyen hoy con esta tecnología en una industria cuentan con una calidad superior, mejor que las que se hacían en el pasado, y con varias ventajas destacadas.
“La casa prefabricada tiene un preconcepto que, a veces, está más arraigado en Buenos Aires que en el resto del país, por eso se intenta utilizar la palabra modular”, explica Federico Azzollini, socio gerente de Icon+. Detalla que actualmente están trabajando con casas modulares diseñadas por arquitectos de renombre, muchos de los cuales están a la vanguardia del diseño. Esto permite acceder a una casa de diseño de autor que, de haberse construido de manera tradicional, podría haber resultado inalcanzable. De este modo, se democratiza la arquitectura y el buen diseño gracias a este tipo de soluciones.
¿Qué ventajas tienen las casas modulares?
Tal como se mencionó, las casas modulares son viviendas construidas a través de fabricación en serie, similar a la industria automotriz. Esto significa que, en lugar de levantar la casa poco a poco en el terreno, se construye casi todo en una fábrica, desde la creación y armado de la estructura hasta las terminaciones finales. Una vez que está lista, se transporta en partes al terreno donde se ubicará.
A pesar de la amplia variedad de opciones, modelos y precios dentro del universo de casas modulares, muchas de sus ventajas son compartidas: ofrecen una calidad más controlada al fabricarse en planta, lo que permite una precisión de 2 mm; tienen una mayor velocidad de ejecución (en algunos casos, se levantan en dos meses), utilizan un proceso más sustentable con un menor impacto ambiental y pueden fabricarse con materiales reciclables casi en su totalidad.
Además de reducir los plazos de obra, las casas modulares logran mayor precisión en costos y medidas; se trasladan al terreno una vez terminadas. Esto es posible porque, al trabajar dentro de una fábrica con los materiales a mano, se evitan inclemencias climáticas (como la lluvia), que pueden alterar el proceso de construcción, o la necesidad de acudir a la obra si se encuentra lejos y lidiar con posibles inconvenientes a distancia. “Si te la entregan en cuatro meses, en lugar de 24, hay una diferencia de valor por inflación muy importante”, señala Lucas Salvatore, presidente de Idero. Un dato relevante de estas viviendas modulares es que son transportables.
En cuanto a los costos de construcción, según especialistas, levantar una casa con tecnología modular está en el mismo nivel que la construcción tradicional. Sin embargo, debido al volumen que pueden alcanzar al construirse en serie, en algunos casos se encuentran entre un 20% y un 25% por debajo de una casa tradicional económica, manteniendo todas las ventajas de esta tecnología.
Asimismo, pueden diseñarse de acuerdo a la zona bioclimática donde se ubicarán, lo que implica cálculos de aislamiento térmico, acústico e ignífugo basados en las temperaturas de la región. Esto se traduce en eficiencia energética y ahorros en suministro de energía eléctrica y gas, agrega Azzollini.
Las casas modulares terminadas y en camino al terreno donde se instalarán. Esta característica resulta especialmente útil en industrias como la del petróleo, donde hay una gran necesidad de vivienda para condiciones climáticas específicas. Además, “si dentro de 30 años Vaca Muerta no tiene el potencial que tiene hoy, existe la posibilidad de relocalizar las construcciones que se hicieron y trasladarlas a Jujuy, si fuera necesario”, explica Salvatore, quien levanta edificios modulares en esa zona.
Por María Josefina Lanzi
* Fuente: LA NACION
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